lunes, mayo 14, 2007
Fernando Flores y su entrevista sobre Chile
Senador Fernando Flores, promotor de la creación de ChilePrimero:
"Estamos descontentos porque el país ha perdido la brújula"
HERNAN CISTERNAS
Foto:Josë Alvajar
"La clase política aparece hoy más preocupada de sus reelecciones que de las futuras generaciones"."Nadie sabe atar ni desatar. Estamos como trabados. Lo que pasa es que hay un sistema que está funcionando mal".
HERNAN CISTERNAS
Esperaba la asistencia de 500 adherentes y llegaron 700. El senador Fernando Flores no podíaa ocultar ayer su satisfacción por el nacimiento del nuevo referente político Chile-Primero, que impulsó junto al ex diputado Jorge Schaulsohn y al parlamentario Esteban Valenzuela, todos ex militantes del Partido Por la Democracia, PPD.
-Por qué Chile-Primero?
"Porque muchos chilenos estamos descontentos de cómo se está haciendo la política en Chile. Nuestro país ha perdido el norte, la brújula. Estamos llenos de peleas, de agarrones, de cosas que no funcionan, como el Transantiago y las irregularidades en EFE (Empresa de Ferrocarriles del Estado). Este no es un problema de este gobierno, sino que es mucho más hondo. De alguna manera los chilenos perdimos el camino que teníamos en los 90. La riqueza no está chorreando como se pensaba, la educación no está funcionando, las soluciones técnicas tampoco".
-En qué sentido se perdió el norte?
"Perdimos la brújula respecto a lo que pasó en los inicios de la década de los 90. Para ser bien honestos, los 90 empiezan con Hernán Bachi -que puso cierto orden y la economía comenzó a crecer- y con la fuerza del retorno a la democracia. Sin embargo, de alguna manera la élite chilena ha estado fallando, entendiendo como tales a la clase política, la clase empresarial y a los chilenos independientes que dejan que las cosas pasen, sin reaccionar".
-Qué ocurre con la clase política?
"La clase política aparece hoy día más preocupada de sus futuras reelecciones que de las futuras generaciones. Hay gente que se va a pasar 24 años en el Senado. Si es deprimente estar todo el día...permanecer 24 años es para terminar loco. A muchos ya les empieza a dar verguenza decir que se dedican a la política".
-Cómo se produjo su cambio de percepción de la política, desde que se postuló a senador y ahora que encabeza un nuevo referente?
"Es cierto que a mi nadie me mandó para ser senador. Lo asumí voluntariamente, por lo tanto, apechugo. Por Dios que me siento cómodo haciendo esto! (la creación de Chile-Primero). Me sentía bastante incómodo en un partido político como el PPD. Cuando entraba y salía de Chile, siempre la política la vi de un modo distinto a como realmente la llegué a conocer en los últimos años: peleas entre izquierda y derecha, parlamentarios que opinan pero que no hacen, poco respeto por la clase dirigente del país. Nadie sabe atar ni desatar. Estamos como trabados. Lo anterior lo digo con plena responsabilidad, sin querer ofender a mis colegas. Lo que pasa es que hay un sistema que está funcionando mal".
-Cuál va a ser el aporte de Chile-Primero en este sentido?
"Estamos interesados en un cambio de estilo de la política. Aunque no somos el mesías, creemos que podemos hacer un aporte para que no siga la manera clásica de hacer política en Chile, donde todo se reduce a presentar candidatos, a buscar reelecciones y después a odiarse. Quienes fundamos Chile-Primero nos caracterizamos por hablar bien de frente. Es un capital que ya tenemos. Estamos interesados en la nueva cultura que va a emerger y que vamos a hacer emerger".
-Cómo se van a organizar?
"No somos un partido político, sino un movimiento, un espacio, una plataforma para hacer política de una manera distinta. Nos hemos propuesto tener 100 mil adherentes de aquí a fines de año, a más tardar marzo. Con ellos tomaremos las decisiones futuras. Si Schaulsohn, Valenzuela y yo tomaramos las decisiones entonces para qué hacemos el movimiento. En ese caso, mejor que siguiéramos como el grupo de los tres amigos".
-Pero no descarta que Chile-Primero llegue a constituirse en un partido político?
"Cien mil personas son tres veces más que el número de militantes de un partido político actual en Chile. Vamos a hacer varias cosas, varias organizaciones. A lo mejor tenemos partidos regionales, no nacionales, que sería más auténtico, tal como lo hace el PSOE (Partido Socialista Obrero Español). El de Barcelona es primero un partido de Cataluña, luego Nacional. Después se afilian".
-Participarín con candidatos en las próximas elecciones?
"Tenemos fuerzas para presentar dos o tres candidatos a alcaldes y varios a concejales. También pretendemos hacer apoyos. Vamos a llamar a gente que pertenece a partidos políticos y bajo ciertas condiciones la vamos a considerar aliados, amigos; les ofreceremos trabajar con ellos, porque queremos que a Chile le vaya bien".
-Alianzas estratégicas con otros partidos?
"No con los partidos, con las personas. No podemos pretender que toda la gente buena esté con nosotros; por distintas razones también esté en otro lado".
"Hay gente que se va a pasar 24 años en el Senado. Si es deprimente estar todo el día... permanecer 24 años es para terminar loco".
NOTA IMPORTANTE
Ingeniero Civil, Doctor en Filosofía del Lenguaje, Político, Empresario y Emprendedor. Senador de la República de Chile, Región de Tarapacá, por el período 2002- 2010. Presidente de la Comisión de Defensa, y Comisión Especial por la Sociedad del Conocimiento. Director de la Fundación País Digital, Fundador de la Fundación Mercator, Fundador de la Fundación Región y Desarrollo. Fundador y Presidente del Colegio Altamira.
Hombre multifacético, es reconocido como uno de los pensadores más importantes de la actualidad en el ámbito de la gestión y de la acción emprendedora.
Nació en Talca, el 9 de Enero de 1943. Casado con Gloria Letelier Rojas. Sus hijos: Pablo Andrés, Rodrigo Fernando, Gloria Patricia, Paula Javiera, María Fernanda y Nicolás viven y trabajan entre California y Londres. Familia que, al igual que Fernando, se compone de miembros multifacéticos, entre ellos hay una esposa que se desempeña en el área lingüístico-emprendedora, hijos que son filósofos, empresarios, expertos en marketing, abogados, cientistas políticos.
Durante el gobierno del Presidente Salvador Allende sirvió tres cargos ministeriales: Ministro de Economía, Ministro de Hacienda y Secretario General de la Presidencia. En esos años dio inicio al proyecto nacional llamado Cybersyn, destinado a aplicar la cibernética a la gestión de las redes industriales chilenas, uno de los primeros intentos de usar las comunicaciones computacionales en la gestión a gran escala.
Luego del Golpe Militar de 1973, fue durante tres años prisionero político en diversos campos de concentración. En esos años de detención, derivó sus reflexiones hacia las comunicaciones y la teoría lingüística. En 1976, al negociar Amnesty International su liberación, sus reflexiones estaban a un paso de ciertas aplicaciones prácticas.
Establecido con su familia en Palo Alto, California, se convirtió en investigador del Departamento de Ciencias de la Computación de la Universidad de Stanford. En un trabajo conjunto con Terry Winograd, un experto en Inteligencia Artificial y profesor de Ciencias de la Computación.
En 1977, Fernando Flores se aboca a un doctorado interdisciplinario en la Universidad de Berkeley, California, bajo la guía de pensadores e investigadores de fama internacional como John Searle (filosofía del lenguaje), Stuart Dreyfus (investigación operacional), Hubert Dreyfus (filosofía continental) y Ann Markussen (gestión empresarial). Dos años más tarde, su disertación, "Comunicación y Gestión en la Oficina del Futuro", se convirtió en el fundamento de su posterior trabajo, cuyo pensamiento nuclear lo constituye la teoría del lenguaje como acción social, que difiere radicalmente de la habitual comprensión de lo que ocurre en las organizaciones.
Basándose en la Teoría de los Actos de Habla de J. L Austin, y en la Teoría de los Compromisos de J. Searle, Flores planteó que gran parte de la coordinación humana ocurre en lo que denominó "conversaciones para la acción", a través de las solicitudes, de las promesas y del cumplimiento de los compromisos entre las personas, y sostuvo que la importancia de los computadores consiste en facilitar este trabajo de coordinación más que en el simple procesamiento de datos.
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