Mensaje de Diego Arria
Queridos amigos y amigas:
Más de la mitad de los votantes están clasificados como "ni-nis" o "no alineados" -o sea indecisos e indiferentes.
Entiendo bien la multiplicidad de consideraciones que han generado esta disposición-pero dada la gravedad de la situación que vivimos he creído oportuno compartir con ustedes unas breves reflexiones cara a nuestra realidad inmediata.
De partida creo que no es el momento de paralizar nuestra voluntad de recuperar la Venezuela que queremos y que
llevamos por dentro. Que a los que solo nos anima y motiva el interés de nuestra gente y del país en general no debemos ceder nuestro espacio y nuestros derechos a nadie. La indiferencia no les elimina el riesgo por lo contrario lo agrava.
El 15 de febrero nos obliga a participar en un proceso abusivo e ilegal. Esto es indudable- como también lo es que si no lo hacemos perderemos seguramente la mejor oportunidad de imponer nuestra voluntad y que el mundo advierta claramente que en nuestro país somos mayoría los que creemos en la democracia, en la libertad, y en la unida nacional-y que las queremos recuperar plenamente.
El punto de ebullición de inflexión del proceso político nuestro culmina el 15 de febrero. No importa cuantos seamos si estamos convencidos y actuamos podemos transmitir "un virus" de recuperación y d libertad a todos los que hoy no se sienten representados. Que somos la mayoría.
Un NO rotundo el 15 de febrero será también un fuerte toque de diana a la Fuerza Armada para que despierte. Para que relean sus obligaciones y responsabilidades constitucionales que los obliga a defender nuestros derechos ciudadanos, por encima de cualquier otra persona o institución.
El Presidente Hugo Chávez proclama que su revolución es armada-esto hace aun más obligante el acatamiento de la Fuerza Armada a la constitución y a las leyes-de otro modo compartirán la responsabilidad con el Presidente Chávez en los delitos, tanto los que incitan con su infame prédica del odio y la violencia, como los que se cometen en su nombre.
Un NO rotundo nos pone en el camino a recuperar el país hoy sometido y atropellado por la irresponsabilidad de un régimen militarizado que le ha delegado autoridad y responsabilidad a un solo hombre olvidando que su responsabilidad es con los ciudadanos-y que esta no se delega en nadie salvo que estén dispuestos a compartir las sanciones que más temprano que tarde se impondrán. Sigo convencido que la Fuerza Armada reencontrará oportunamente su camino-que es el de la institucionalidad democrática, y el defensor de los derechos ciudadanos. Igualmente de la salvaguardia de la soberanía nacional hoy condicionada hasta subordinada a otro país y otros intereses contrario a los nuestros.
A mí personalmente me disgustan algunas posiciones y actitudes de muchos políticos y de sus organizaciones-pero
estas empalidecen al ver lo que nos depara el futuro cercan si no participamos a fortalecer el NO.
Cuando recuperemos nuestras libertades podremos reparar nuestras limitaciones y superar diferencias pero hoy solo
cabe participar masivamente y votar NO. Allí comenzaremos a reintegrarnos como país. Un proceso difícil pero indispensable que no tengo dudas está a nuestro alcance.
No es solo el presente que nos han dilapidado-es el futuro que le están robando especialmente a los más jóvenes. A
los más pobres. A los más desprotegidos.
Venezuela no puede darse el lujo de postergar más la tragedia que sufrimos. Cuatro años más representaría el
colapso de la república- que hoy sentimos cercano.
Me permito invitarlos a que hagamos del 15 de febrero una Causa Común votando NO.
Fraternalmente,
Diego E. Arria
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