miércoles, julio 02, 2008
La emoción se extendió a las calles de Bogotá
por Javier Mozzo Peña
BOGOTA (Reuters) - Llanto y felicidad desbordaban a los familiares de los 15 rehenes liberados el miércoles por el Ejército de Colombia, incluyendo a la franco colombiana Ingrid Betancourt y tres estadounidenses que permanecieron por años en manos de la guerrilla izquierdista de las FARC.
La emoción de extendió a las calles de Bogotá donde cientos de colombianos salieron a festejar tocando bocinas y otros muchos lanzaron papel picado desde los edificios de la ciudad.
Los rehenes, que forman parte de un grupo de secuestrados con fines políticos que pretendían ser intercambiados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), fueron rescatados en una operación militar en la selva del suroriente del país, en el departamento del Guaviare.
"Estoy llena de felicidad, estoy que no veo la hora de abrazar a mi hermana. Han sido largos años de espera," expresó Astrid Betancourt, hermana de Ingrid, a la radio privada RCN, en medio de sollozos.
"Quiero decir que hoy es el día más feliz de mi vida... quiero decirle a ella que la amo con todo mi corazón. El saber que mi mamá está libre, es un momento de increíble felicidad ", dijo Lorenzo Delloye, hijo de Ingrid, a la cadena de televisión RCN.
Las personas liberadas gozan de relativa buena salud, aseguró el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, en una conferencia de prensa en la que anunció el resultado de la operación, en la que también fueron capturados dos guerrilleros que custodiaban a los secuestrados.
"Estamos que lloramos de la felicidad (...) usted no sabe cómo nos encontramos de felices," dijo Ricardo Malagón, sobrino de uno de los militares liberados en la operación "Jaque" del Ejército.
NOVEDAD EN TRASLADO DE LIBERADOS
Automóviles y camiones en la capital colombiana, en varias ciudades y en las carreteras hacían sonar sus bocinas y sus ocupantes ondeaban banderas de Colombia, al tiempo que centenares de personas se trasladaron a las calles de los familiares de los rehenes liberados, para abrazarlos.
Desde pisos altos de edificios del centro de Bogotá, personas tiraban papel picado y colocaban banderas blancas en las ventanas para celebrar la liberación de los secuestrados.
Una fuente del Gobierno dijo que en último momento se decidió traer a los rehenes a una base aérea militar en Bogotá, y descartar un centro de entrenamiento del Ejército al sur de la ciudad donde inicialmente tenían previsto presentarlos.
"Tengo mucha alegría, como todos los colombianos. Tenemos que reconocer que fue una operación exitosa y vamos a tener la posibilidad de tener entre nosotros a estas personas," dijo el ex presidente Ernesto Samper.
El primer esposo de Ingrid Betancourt, Fabrice Delloye, recordó a los familiares de rehenes muertos a manos de miembros de las FARC cuando pretendían ser rescatados por las Fuerzas Militares.
"Estoy muy contento, con una alegría impresionante, pero al mismo tiempo pensando en todas las familias en Colombia que han sufrido por el flagelo del secuestro," agregó Delloye a la radio privada Caracol.
"Pienso en las familias de los diputados, en las familias del ministro Echeverri, del gobernador Gaviria, de los militares que han desaparecido en el cautiverio," agregó Delloye.
(Reporte de Javier Mozzo Peña. Editado por Silene Ramírez)
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario