POR
LONDRES - Vladimir Putin quizá ( o no) disfruta de un 80% de apoyo público en Rusia por su política en relación a Ucrania; pero se ha vuelto cada vez más claro qué Él ha tratado de comer más de lo que puede masticar. La pregunta es: ¿En qué momento será insostenible su posición como presidente ?
Deja a un lado el trasfondo moral y geopolítica del embrollo de Ucrania. Los rusos podrían estar justificados, creo yo, en su opinión cuando el West Tomó ventaja de la debilidad post-comunista de Rusia al invadir el espacio histórico de ese país. La Doctrina Monroe 'puede ser incompatible con el derecho internacional contemporáneo; pero todos los poderes suficientemente fuertes deben hacer cumplir una esfera estratégica de interés sobre ese asunto.
Hay méritos, creo también, en la afirmación de Putin de que un mundo multipolar es mejor que un mundo unipolar para promover la causa de la prosperidad humana. Ninguna potencia o coalición es lo suficientemente desinteresado para reclamar una soberanía universal.
Por lo tanto, no hat ninguna sorpresa lo que hizo Rusia y otros países cuando comenzaron a construir una la estructura institucional de la multipolaridad. La Organización de Cooperación de Shanghai, que incluye a Rusia, China y cuatro países de Asia Central ex-soviética, se estableció en el 2001 El mes pasado, los cinco países BRICS - Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica - establecieron el Nuevo Banco para el Desarrollo y un fondo de reserva contingente para diversificar las fuentes de financiamiento oficial a los países en desarrollo o en vías de desarrollo.
"Sin condiciones" la política del grupo BRICS impuesta explícitamente desafía a los prestatarios del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, a pesar de la política que sigue siendo importante. De hecho, es imposible imaginar los líderes de China aprobando un préstamo a un país que, por ejemplo, podría ser Taiwan o acepta reclamaciones tibetanos sobre su independencia.
Pero de hecho Rusia es demasiado débil para desafiar a Occidente aún más, por lo menos en la forma en que lo hizo lo hizo en Ucrania.
El PIB de Rusia es de alrededor de 2 billones de dólares y su población de 143 millones está cayendo rápidamente. Los Estados Unidos y la Unión Europea tienen un PIB combinado de alrededor de 34.000 mil millones dólares y una población de 822 millones y esto está creciendo rápidamente, lo cual significa que Occidente puede causar mucho más daño a Rusia que Rusia puede infligir a Occidente.
Incluso en su apogeo, la Unión Soviética era una superpotencia de una sola pista. Con una economía alrededor de un cuarto del tamaño de EE.UU del que se pueda mantener la paridad aproximada por el gasto militar cuatro veces más de su ingreso nacional para su defensa como lo hizo los EE.UU. - en detrimento de las condiciones de vida de los ciudadanos comunes.
Hoy el equilibrio de poder es aún más desfavorable. La economía de Rusia es más débil, y su armamento están obsoletos. Rusia conservan una capacidad nuclear formidable, pero es inconcebible que lo usaría para fijar sus objetivos en Ucrania.
Así que nos quedamos con un final que se avecina en la que Putin puede retener su botín - Crimea y el control de una partes de habla rusa del este de Ucrania - pero no hacia abajo.
Rusia se requerirá de elementos de síntesis como condición para normalizar sus relaciones con Occidente. Pero Putin lo más probable es que tratae de apuntalar a los separatistas del este de Ucrania, siempre y cuando le sea posible - Tal vez con la ayuda militar disfrazada de ayuda humanitaria - y además absolutamente negarse a la renunciar de Crimea.
Esto conducirá a una mayor intensificación de las sanciones de Occidente: las restricciones a las exportaciones de gas, las restricciones generales a la exportación, la suspensión de la Organización Mundial del Comercio, la retirada de la Copa Mundial de torneo de fútbol de la FIFA 2018, y así sucesivamente. Todo esto, junto con el endurecimiento de las sanciones actuales, incluyendo la exclusión de los bancos rusos de los mercados de capitales occidentales, está destinado a causar una grave escasez, la disminución de los niveles de vida, y los principales problemas para la clase propietaria de Rusia.
La reacción natural del público ruso será el de apoyar a su líder. Pero el apoyo a Putin no será profundo. El apoyo antes, no después, del debate sobre los costos de la política de Putin es cuando ha tenido lugar. Y lo hizo silenciando a control estatal de los medios de comunicación y la supresión de la oposición.
Es natural y correcto pensar en posibles compromisos: la neutralidad de Ucrania garantizado, mayor autonomía regional dentro de una Ucrania Federal, la administración internacional provisional en Crimea para supervisar un referéndum sobre su futuro, y otras acciones similares.
La cuestión no es la cantidad de este tipo de paquete que Putin aceptaría, pero si alguno de eso que se le ofreció. En Occidente ya no creen en nada de lo que dice Putin. El Presidente de EE.UU. Barack Obama, lo ha acusado públicamente de mentir. La canciller alemana, Angela Merkel, antes de su fuerte respaldo a de Putin en Europa, informa que lo han descrito como delirante. (El colmo para ella aparentemente sobre su intento de culpar el derribo de Malaysia Airlines Vuelo 17 por el gobierno de Ucrania.)
Todos los líderes mienten y disimulan hasta cierto punto; pero la escala de la desinformación proveniente del Kremlin ha sido épica. Así que la pregunta que debemos hacernos es: ¿El West está preparado para hacer las paces con Putin?
Líderes cuya política exterior es de aventuras terminan en derrota y por lo general no sobreviven mucho tiempo en el cargo. Cualquiera de los mecanismos formales se utilizan para destronarlos - como ocurrió, por ejemplo, en la Unión Soviética, cuando el Comité Central expulsó del poder a Nikita Khrushchev en 1964 - o cualquier mecanismos informal que entre en juego. La Élite del poder de Putin comenzará a fracturarse - de hecho, ese proceso en junio ya han comenzado. La presión crecerá. No hay necesidad, se dirá, por que su país está con él.
Tal escenario, inimaginable hace unos meses, ya en junio sea perfila como el drama Ucrania que se mueve al final. La era Putin 'puede ser más pronto de lo que pensamos.
Obtenga más información en http://www.project-syndicate.org/commentary/robert-skidelsky-asks-if-the-endgame-in-ukraine-will-also-mean-the-end-for-vladimir-putin#8ZJV0SpTGMyxd74x.99
ROBERT SKIDELSKY
LONDRES - Vladimir Putin quizá ( o no) disfruta de un 80% de apoyo público en Rusia por su política en relación a Ucrania; pero se ha vuelto cada vez más claro qué Él ha tratado de comer más de lo que puede masticar. La pregunta es: ¿En qué momento será insostenible su posición como presidente ?
Deja a un lado el trasfondo moral y geopolítica del embrollo de Ucrania. Los rusos podrían estar justificados, creo yo, en su opinión cuando el West Tomó ventaja de la debilidad post-comunista de Rusia al invadir el espacio histórico de ese país. La Doctrina Monroe 'puede ser incompatible con el derecho internacional contemporáneo; pero todos los poderes suficientemente fuertes deben hacer cumplir una esfera estratégica de interés sobre ese asunto.
Hay méritos, creo también, en la afirmación de Putin de que un mundo multipolar es mejor que un mundo unipolar para promover la causa de la prosperidad humana. Ninguna potencia o coalición es lo suficientemente desinteresado para reclamar una soberanía universal.
Por lo tanto, no hat ninguna sorpresa lo que hizo Rusia y otros países cuando comenzaron a construir una la estructura institucional de la multipolaridad. La Organización de Cooperación de Shanghai, que incluye a Rusia, China y cuatro países de Asia Central ex-soviética, se estableció en el 2001 El mes pasado, los cinco países BRICS - Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica - establecieron el Nuevo Banco para el Desarrollo y un fondo de reserva contingente para diversificar las fuentes de financiamiento oficial a los países en desarrollo o en vías de desarrollo.
"Sin condiciones" la política del grupo BRICS impuesta explícitamente desafía a los prestatarios del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, a pesar de la política que sigue siendo importante. De hecho, es imposible imaginar los líderes de China aprobando un préstamo a un país que, por ejemplo, podría ser Taiwan o acepta reclamaciones tibetanos sobre su independencia.
Pero de hecho Rusia es demasiado débil para desafiar a Occidente aún más, por lo menos en la forma en que lo hizo lo hizo en Ucrania.
El PIB de Rusia es de alrededor de 2 billones de dólares y su población de 143 millones está cayendo rápidamente. Los Estados Unidos y la Unión Europea tienen un PIB combinado de alrededor de 34.000 mil millones dólares y una población de 822 millones y esto está creciendo rápidamente, lo cual significa que Occidente puede causar mucho más daño a Rusia que Rusia puede infligir a Occidente.
Incluso en su apogeo, la Unión Soviética era una superpotencia de una sola pista. Con una economía alrededor de un cuarto del tamaño de EE.UU del que se pueda mantener la paridad aproximada por el gasto militar cuatro veces más de su ingreso nacional para su defensa como lo hizo los EE.UU. - en detrimento de las condiciones de vida de los ciudadanos comunes.
Hoy el equilibrio de poder es aún más desfavorable. La economía de Rusia es más débil, y su armamento están obsoletos. Rusia conservan una capacidad nuclear formidable, pero es inconcebible que lo usaría para fijar sus objetivos en Ucrania.
Así que nos quedamos con un final que se avecina en la que Putin puede retener su botín - Crimea y el control de una partes de habla rusa del este de Ucrania - pero no hacia abajo.
Rusia se requerirá de elementos de síntesis como condición para normalizar sus relaciones con Occidente. Pero Putin lo más probable es que tratae de apuntalar a los separatistas del este de Ucrania, siempre y cuando le sea posible - Tal vez con la ayuda militar disfrazada de ayuda humanitaria - y además absolutamente negarse a la renunciar de Crimea.
Esto conducirá a una mayor intensificación de las sanciones de Occidente: las restricciones a las exportaciones de gas, las restricciones generales a la exportación, la suspensión de la Organización Mundial del Comercio, la retirada de la Copa Mundial de torneo de fútbol de la FIFA 2018, y así sucesivamente. Todo esto, junto con el endurecimiento de las sanciones actuales, incluyendo la exclusión de los bancos rusos de los mercados de capitales occidentales, está destinado a causar una grave escasez, la disminución de los niveles de vida, y los principales problemas para la clase propietaria de Rusia.
La reacción natural del público ruso será el de apoyar a su líder. Pero el apoyo a Putin no será profundo. El apoyo antes, no después, del debate sobre los costos de la política de Putin es cuando ha tenido lugar. Y lo hizo silenciando a control estatal de los medios de comunicación y la supresión de la oposición.
Es natural y correcto pensar en posibles compromisos: la neutralidad de Ucrania garantizado, mayor autonomía regional dentro de una Ucrania Federal, la administración internacional provisional en Crimea para supervisar un referéndum sobre su futuro, y otras acciones similares.
La cuestión no es la cantidad de este tipo de paquete que Putin aceptaría, pero si alguno de eso que se le ofreció. En Occidente ya no creen en nada de lo que dice Putin. El Presidente de EE.UU. Barack Obama, lo ha acusado públicamente de mentir. La canciller alemana, Angela Merkel, antes de su fuerte respaldo a de Putin en Europa, informa que lo han descrito como delirante. (El colmo para ella aparentemente sobre su intento de culpar el derribo de Malaysia Airlines Vuelo 17 por el gobierno de Ucrania.)
Todos los líderes mienten y disimulan hasta cierto punto; pero la escala de la desinformación proveniente del Kremlin ha sido épica. Así que la pregunta que debemos hacernos es: ¿El West está preparado para hacer las paces con Putin?
Líderes cuya política exterior es de aventuras terminan en derrota y por lo general no sobreviven mucho tiempo en el cargo. Cualquiera de los mecanismos formales se utilizan para destronarlos - como ocurrió, por ejemplo, en la Unión Soviética, cuando el Comité Central expulsó del poder a Nikita Khrushchev en 1964 - o cualquier mecanismos informal que entre en juego. La Élite del poder de Putin comenzará a fracturarse - de hecho, ese proceso en junio ya han comenzado. La presión crecerá. No hay necesidad, se dirá, por que su país está con él.
Tal escenario, inimaginable hace unos meses, ya en junio sea perfila como el drama Ucrania que se mueve al final. La era Putin 'puede ser más pronto de lo que pensamos.
Obtenga más información en http://www.project-syndicate.org/commentary/robert-skidelsky-asks-if-the-endgame-in-ukraine-will-also-mean-the-end-for-vladimir-putin#8ZJV0SpTGMyxd74x.99
No hay comentarios.:
Publicar un comentario